Muchas veces, a los padres les sorprende y molesta observar que sus hijos no son capaces de prestar ni compartir, y suelen pensar que han fallado en algún punto de su educación.
A los hijos se le deben educar con el ejemplo y el uso del dialogo, sin olvidar escuchar sus dudas y dificultades antes sus vidas. Los padres deben ser pacientes, humildes, fuertes, sinceros, optimistas, alegres, amigables y empáticos con sus hijos.
Se deben evitar ser padres dominantes, conservacionistas, retadores o irresponsables. Pero igualmente es un error ser padres sobreprotectores y complacientes.
Según sean los padres, así se comportarán sus hijos, es decir, si el padre es tacaño y poco solidario entonces su hijo jamás será generoso.
-Se debe ser paciente para no perder el control de la educación.
-Se debe ser sincero, recuerden que ustedes son el espejo de sus hijos.
-Se debe ser humilde, si saben aceptar y admitir sus errores, sus hijos copiarán esa actitud.
-Se debe ser fuerte, solo así tendremos el poder suficiente para aventurarnos en la crianza de los hijos, y poder exigir en aquello en lo cual no debemos acceder.
-Se debe ser optimista, para nos rendirnos jamás antes los obstáculos que nos trae ser buenos padres.
-Se debe ser empático y debemos escuchar a nuestros hijos para así entender y dar a entender a nuestros hijos que estamos ayudándole en lo mejor que podemos.
-Se debe ser ejemplar, para esmerarse en educar a sus hijos mediante el ejemplo y la conversación abierta. Estos padres esconden sus defectos para evitar que sus hijos copien lo malo de ellos y se concentren en tomar un camino más perfecto en su educación.
-Se amigo de tus hijos, esto ayuda a que tus hijos te tomen más confianza y sea abierto contigo, además evitará la sobreprotección.
ºLos padres dominantes imponen reglas estrictas con mucha rigidez y mano dura, atemorizando a los hijos pensando con esto forjaran su carácter y que crecerán ajustados a las leyes sociales y en que tendrán éxito en sus vidas.
ºLos padres conservacionistas tratan por todos los medios que sus hijos sean un fiel reflejo de lo que ellos pasaron en sus vidas, obligando a sus hijos a que sigan el mismo camino y se eduquen tal cual ellos fueron educados.
ºLos padres retadores son muy regidos, comparan a sus hijos y esperan siempre a que estos sean mucho mejores que los demás y logren ser muchos más grandes e importantes que ellos mismos.
ºLos padres irresponsables dejan la educación de sus hijos a la suerte y esperan a que ellos salgan adelante por sus propios medios, sus hijos toman el camino que mejor le parece y no sienten respeto alguno hacia sus progenitores, son generalmente hijos rebeldes.
En la adolescencia de sus hijos, los padres deben esmerarse en mejorar sus virtudes para reflejar además de cariño y amor, confianza y acercamiento.
Bajo ningún concepto se debe criticar la actitud de los hijos con palabras insultantes (egoísta, torpe.’…). Lo único que se consigue con eso es que se sienta desconcertado e inseguro, ya que no entenderá nuestra reacción.
Comparte frecuentemente con tus hijos en familia, sin llegar al error de obligar, recuerda que ellos también tienen sus derechos y que debemos respetarlos, son seres humanos con las mismas necesidades y los mismos sentimientos que nosotros.
Saludos:
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